En 2008, el suicidio ya se situó como la primera causa externa de defunción, con 3.421 casos, cifra similar a 2007. No hay cifras oficiales para 2011, pero en 2010 aún se mantenía como primera muerte violenta, en parte por el descenso de muertes atribuibles a accidentes de tráfico. El diario El Plural ofrecía oficiosamente un aumento significativo de la cifra de suicidios en 2011: 4.500 personas, es decir, más de 1.000 personas de incremento desde el inicio de la crisis. Estas muertes están directamente relacionadas con la actual deriva socioeconómica y con datos muy preocupantes, como el aumento del paro por encima de los 5 millones de personas y acercándose a los seis.
Hace solo un mes se confirmó en el Congreso Nacional de Psiquiatría celebrado en Bilbao que los problemas económicos son el origen del 32% de los suicidios. De hecho, los problemas derivados de la crisis sistémica se alzan como la principal causa, seguida del desamor y los problemas de pareja (25,8%), problemas psiquiátricos (19,1%) y conflictos familiares (11,2%). Nueve personas se suicidan cada día en España; tres por culpa de la crisis.