Tomaron para identificarse como grupo, el nombre del transporte de pasajaros vinculado a una corriente social claramente proletaria: el tren.
Es que cada día del año, cantan yendo y viniendo viaje tras viaje en ese ruidoso escenario móvil. Con equipo de sonido propio, se anuncian, piden palmas, sorprenden, cantan y asombran a pasajeros que salen del letargo, de las preocupaciones, participan y agradecen.
Las líneas suburbanas del cordón bonaerense conocen su talento y el público ocasional (y no tanto) los recibe como auténticas luminarias de un underground fecundo, convencidos de estar participando del nacimiento de una estrella.
Sus voces afinadas muestran melodías y letras asociadas a las vivencias de su gente, historias simples y directas que en espiral van engarzando adherentes que testimonian su recepción con lágrimas o sonrisas.
Cambiemos todos nuestra forma de pensar. Que los
corruptos no nos vuelvan a ganar.
Paz, trabajo y libertad. Es eso los que los
niños van a a heredar. Paz, trabajo y
libertad. Por eso estamos luchando sin descansar.
Ruega que el sueño hermano se haga
realidad. No te me caigas, vamos juntos a luchar.
Que con discursos no nos vuelvan a comprar.
Hagamos culto a la solidaridad........