Jhon, cuya edad no llega a los dos años, llega con su madre al arenal de un céntrico parque público de Barcelona, donde se encuentra por sorpresa una caja repleta de juguetes. Él aún no sabe leer, pero en cada uno de los objetos hay mensajes como “Soy del parque”, “Soy para compartir” o “Social Toy”. Éste último es el nombre que recibe el movimiento que se está extendiendo por Barcelona, principalmente, y otros municipios del área metropolitana, y que pretende que los niños de la ciudad guarden sus juguetes en los parques infantiles para uso y disfrute de los demás usuarios. “De esta forma hacen un poco suyos estos espacios públicos porque algo que venía de su casa ahora forma parte de ellos”, comenta Marta Ros, cofundadora de Social Toy.
La iniciativa surgió hace un año y medio a raíz de una conversación entre dos madres, Marta Ros y Sarah Rink, que se plantearon qué sucedería si dejaran los juguetes de sus hijos indefinidamente en el parque. Reunieron unos cuantos juguetes y una caja, y los marcaron con el nombre “Social Toy”, junto con una pequeña explicación. La tendencia, según explican sus impulsoras, persigue el objetivo de inculcar a los niños los valores del “civismo, el respeto hacia lo público y el consumo responsable”.
Leer más: http://www.lavanguardia.com/vida/20140904/54414243456/juguetes-comunitarios-proliferan-parques-barcelona.html#ixzz3FLmiWLOr
Síguenos en: https://twitter.com/@LaVanguardia | http://facebook.com/LaVanguardia