sábado, 19 de julio de 2014

Es rubia y guapa, pero ha perdido glamour. “Soy la Barbie obrera. Como cientos de en China, trabajo en cadenas de fabricación de juguetes de Mattel, bajo condiciones indignas”, con este eslogan dos ONGs, pretenden aprovechar la campaña de Navidad para concienciar en Franciasobre las condiciones de trabajo en las factorías de Mattel en China.

Se trata de las ONGs “China Labor Watch” y “Peuples Solidaires/Action Aid” que ya publicaron un informe en el mes de octubre en el quedenunciaban que los empleados de los fabricantes de Barbie sufrían:

-13 horas de trabajo al día, los siete días de la semana.

-Dormitorios de las fábricas con exceso de ocupación, insalubres.

-Manipulación de productos tóxicos sin ningún tipo de protección.

-Confiscación de documentación en el momento de la contratación.

-Rechazo de bajas por maternidad.

-Impago de cotizaciones .

-Impago de horas extra.

 La denuncia la elaboraron en base a una investigación en la que miembros de “China Labor Watch” se infiltraron en seis de esas fábricas.

Además realizan un desglose del reparto económico sobre el precio de una muñeca. Así, el salario de los obreros chinos representa  de media, el 0,8% del precio de venta de la Barbie, es decir 12 céntimos por cada muñeca vendida a 15 euros.

De esos 15 euros, 12 se destinarían a la remuneración de los accionistas,la venta y distribución, y el marketing.  El resto correspondería a las materias primas empleadas, derechos de aduana, remuneración de los directivos chinos y el transporte en China.

Según sus cálculos, cada minuto, accionistas, comerciales y vendedores cobran 1.824 euros frente a los 18, de los trabajadores que han fabricado 152 muñecas.

El desfase dicen, podría agravarse porque Mattel ejerce una presión impresionante para recortar los costes de producción.

Las ONGs aseguran que únicamente pretenden concienciar y no impulsar un boicot que finalizaría con el despido de esos mismos trabajadores. En definitiva, ejercer una presión sobre Mattel que es el fabricante de juguetes líder del sector y tiene poder de influencia. Para ello han iniciado una campaña en las redes sociales con la recogida de firmas para “Liberar a la Barbie obrera”, y la publicación de una carta. Por París, estos días, pasean una Barbie gigante que reparte folletos y tienen prevista llevarla a Lyon, Nantes y Marsella.